domingo, enero 09, 2005

El ego de algunas "estrellas" del desarrollo de videojuegos

Haciendo limpieza de revistas, he encontrado una entrevista a John Romero, en la OK PcGamer de julio de 1999. En esos momentos se encontraba trabajando en el Daikatana, un juego que tras unos cuantos años de desarrollo, decepcionó cuando salió a la venta. Pues bien, este hombre que lleva unos cuantos años prometiendo grandes juegos, pero que no ha hecho nada decente desde que salió de ID, dice en la entrevista: "Half-Life es fantástico. Ahora mismo es el juego definitivo para un solo jugador. Pero hay muchas cosas en Daikatana que sé que lo harán mejor que Half-Life." jejejejejeje. Esta frase del "Beckham del videojuego" (más nombre que otra cosa) es sólo un pequeño ejemplo del egocentrismo del que hacen gala algunos personajes del mundillo del videojuego.
Vamos con otro ejemplo: Visitando la web de Raph Koster, creador del libro "A Theory of Fun" del que os hablé hace unos días, veo éste logotipo:
Vamos, que David Perry crea un logotipo para recomendar todo tipo de cosas que él crea que merecen la pena. Vaya, a partir de ahora al comprar un producto habrá que ver si aparece su recomendación, antes de ver si pasa el certificado CE o cualquier otro certificado de calidad, jejeje. Vale que éste hombre haya sido uno de los creadores de MDK, Messiah, etc., pero de ahí a crearse su propia certificación de calidad...
Y ahora viene otro personaje: American McGee. Un hombre que trabajó en ID, en el Doom, Doom II, Quake y Quake II. La verdad es que es un curriculum que más de uno quisieramos, pero al igual que John Romero, su trayectoria después de salir de la compañía de Texas, no ha sido todo lo brillante que él quiere hacernos creer, aunque para gustos, colores. De todos modos, una persona que en su web dice: "I want to be the next Walt Disney, only a little more wicked.", ya deja bastante claro por donde van los tiros. Además tiene la costumbre de añadir su nombre como prefijo en los titulos de sus juegos: "American McGeé's Alice", "American McGee presents Scrapland", etc. Esperemos que al menos en el caso del juego español, su nombre sirva para que las ventas del juego sean buenas, ya que debe ser bastante frustrante para un equipo de desarrollo que un juego diseñado y creado por ellos mismos, aparezca ante el gran público como el juego de American McGee. Aunque claro, si además de las ventas, ésto hace que un estudio español tenga continuidad y que las compañias americanas se fijen en la calidad de los desarrolladores que hay en España, pues bienvenidos sean American McGee, David Perry, John Romero y quién haga falta. Pero por favor, un poquito de humildad, que tampoco éstamos hablando de Hitchcock, Orson Welles, o Stan Lee.